Cuando alquilamos el coche, le preguntamos al dueño del Rent a Car, que nos indicara alguna playa bonita y solitaria entre Playa del Carmen y Tulum. Nos habló de una, de la que lamentablemente no recordamos el nombre, en la que incluso iban de desovar las tortugas. Llegamos a ella bastante temprano, sobre las 08:30 de la mañana. Aparcamos el coche y cuando bajabamos por un camino de arena hasta la playa, se nos plantó enmedio una iguana. Merce decía que no pasaba, menos mal que la convencí para pasar, lo que no se dió cuenta es que por el otro lugar que pasamos para esquivarla, había otra iguana a pocos metros tomando el sol.
La playa tenía más de un kilómetro de larga y rodeada de vegetación. Estuvimos completamente solos hasta las 10:00 de la mañana que empezó a llegar gente, unas diez personas tan solo.
Luego estuvimos visitando varias playas no tan espectaculares como esta. También fuimos a las playas de los grandes resorts que anuncian las agencias de viajes en España, y la verdad que la gente son como borregos, no se mueven de la misma playa del hotel, ni 200 metros más allá.
A medio día nos comimos una parrillada de pescado junto a la playa, vease en la foto la pedazo de bandeja que nos pusieron.
La playa tenía más de un kilómetro de larga y rodeada de vegetación. Estuvimos completamente solos hasta las 10:00 de la mañana que empezó a llegar gente, unas diez personas tan solo.
Luego estuvimos visitando varias playas no tan espectaculares como esta. También fuimos a las playas de los grandes resorts que anuncian las agencias de viajes en España, y la verdad que la gente son como borregos, no se mueven de la misma playa del hotel, ni 200 metros más allá.
A medio día nos comimos una parrillada de pescado junto a la playa, vease en la foto la pedazo de bandeja que nos pusieron.
No hay comentarios:
Publicar un comentario