jueves, 13 de diciembre de 2007

DIA 22. FIN DE VIAJE


El último día nuestro avión salía para España por la tarde, así que por la mañana aprovechamos para bañarnos y comer en la misma playa del Carmen. Luego recogimos nuestras maletas del hotel y en autobus nos dirigimos al Aeropuerto de Cancún. La tarde era bastante lluviosa y gris, por lo menos así la despedida no fue tan triste, y nos resultó un poco más facil abandonar este paraiso.

DIA 21. OTRO DIA IMPRESIONANTE EN COZUMEL

Playa Palancar

Playa Palancar

Restaurante "Paradise Cafe"

Unas margaritas con el pelo rasta



Era el último día para disfrutar de nuestro viaje y como nos había encantado Cozumel, decidimos repetir. Hicimos la misma operación que la otra vez, cruzamos en ferry hasta la isla y luego alquilamos la moto.
Hoy estabamos decididos a dar la vuelta completa a la isla, ya que la otra vez solo vimos una parte. Pasamos la mayoría del día en nuestra querida playa Palancar. Esta vez estuve haciendo snorkel en un barco del club de buceo que hay en la playa, mientras que Merce se quedó tomando el sol.
Cogimos nuestra moto y empezamos nuestro recorrido alrededor de la isla. A comer paramos en un restaurante Reagee llamado "Paradise Cafe". Frente al restaurante había otro local con música Reagee donde tomamos nuestra primera Margarita. Luego conforme ibamos haciendo kilómetros, parábamos en todos los chiringuitos de las playas hasta acabar un poco perjudicados. Al devolver la moto uno de los amigos del dueño, al vernos asi, le dijo que nos mirara las rodillas, por si nos habiamos caido jeje.
Devolvimos la moto y nos fuimos directamente al puerto. Nada mas llegar, resulta que el ferry acababa de salir y teníamos que esperar una hora hasta el siguiente. La espera la hicimos tomando unas margaritas, para no andar con mezclas.
Al fin tomamos el ferry ya anocheciendo y todavía nos duraba nuestro ultimo cubalitro de margarita. Lo de como llegamos al hotel no lo cuento.


DIA 20. CHICHEN ITZÁ

El Castillo

Las Mil Columnas vistas desde la pirámide

Pa habernos matao!!!

Juedo de Pelota

El Observatorio

Aprovechando que teniamos el coche, decidimos hacer la excursión a Chichen Itza por nuestra cuenta, la verdad que la Lonely te lo explica todo bastante bien, y a mi parecer, no hace falta contratar una excursión con guía.
De camino a Chichen Itza cogemos la autopista de peaje por la que ibamos practicamente solos, tan solitaria estaba la autopista, que se nos cruzó una tarantula inmensa frente a nosotros.
Llegamos a Chichen Itza y con un calor asfixiante empezamos a recorrer todas la ruinas. La verdad que aunque ya habiamos estado en Uxmal y Palenque, Chichen es majestuoso. En el centro del enclave arqueológico se encuentra El Castillo, también llamado la Pirámide de Kukulcán, que a pesar de haberla visto mil veces en fotos, el presenciarla en vivo impresiona bastante. Creo que ahora ya no se puede subir a la pirámide por el deterioro, pero cuando nosotros estuvimos si que se podía subir. Para los no amantes de las alturas no les recomiendo esta subida, aunque lo peor es la bajada, los escalones paracen estar casi en vertical. También nos gustó el mucho el Caracol (Observatorio), el Juego de Pelota y las Mil Columnas.
De regreso a Playa del Carmen comenzó a llover y nuestro coche parecia perder tracción, creiamos que era por el aguaplanin. Al día siguiente al devolverlo nos dimos cuenta que habiamos pinchado y la rueda estaba casi vacía.

DIA 19. RECORRIENDO PLAYAS DE LA RIVIERA MAYA

La playa casi desierta

Iguana playera

Parrillada

Cuando alquilamos el coche, le preguntamos al dueño del Rent a Car, que nos indicara alguna playa bonita y solitaria entre Playa del Carmen y Tulum. Nos habló de una, de la que lamentablemente no recordamos el nombre, en la que incluso iban de desovar las tortugas. Llegamos a ella bastante temprano, sobre las 08:30 de la mañana. Aparcamos el coche y cuando bajabamos por un camino de arena hasta la playa, se nos plantó enmedio una iguana. Merce decía que no pasaba, menos mal que la convencí para pasar, lo que no se dió cuenta es que por el otro lugar que pasamos para esquivarla, había otra iguana a pocos metros tomando el sol.
La playa tenía más de un kilómetro de larga y rodeada de vegetación. Estuvimos completamente solos hasta las 10:00 de la mañana que empezó a llegar gente, unas diez personas tan solo.
Luego estuvimos visitando varias playas no tan espectaculares como esta. También fuimos a las playas de los grandes resorts que anuncian las agencias de viajes en España, y la verdad que la gente son como borregos, no se mueven de la misma playa del hotel, ni 200 metros más allá.
A medio día nos comimos una parrillada de pescado junto a la playa, vease en la foto la pedazo de bandeja que nos pusieron.

DIA 18. RALLY AVENTURA EN PUNTA ALLEN

El camino infernal a Punta Allen

Punta Allen

En un muelle de Punta Allen

Restaurante Muelle Viejo

Hoy nos decidimos por alquilar un coche por dos dias, creo que nos salió por unos 40$ al día. Haciendo caso a nuestra guia Lonely, que hasta ahora no nos había fallado, cogimos camino hasta Punta Allen, 40 kms al sur de Tulum. Según la guía, el camino es malo pero no te advierte de que es solamente practicable en coches adecuados. Nuestro carro era un Chevy, muy parecido al antiguo Opel Corsa. Llegamos hasta Tulum y enfilamos una carretera de tierra paralela al mar, que al principio no era mala, paramos en alguna playa solitaria para tomar un baño. Más tarde y conforme iban pasando los kilómetros, la cosa se iba poniendo peor. Había unos baches tremendos en los que cabía practicamente nuestro coche entero, pero no hubo problema, pasabamos por en medio de ellos. El problema surgió cuando comenzó a llover y los tremendos baches o badenes, se iban llenando de agua. Durante el trayecto vimos pocos coches, pero todos eran 4x4, la mayoría de ellos se dieron la vuelta cuando comenzó a llover y vieron los charcos, nosotros seguimos ya nos quedaban pocos kilómetros. La verdad que lo pasamos bastante mal esquivando baches, ya que no sabiamos la profundidad que tenían, pero minutos más tarde paró de llover y enseguida llegamos al fin a Punta Allen. El pueblo es pequeñito con unos cuantos alojamientos y restaurantes. Punta Allen está perdido y gracias a este infernal camino, no había casi nadie, nos encontramos con un total de 6 turistas más, el tiempo que estuvimos por allí. Nos bañamos en sus calidas aguas y comimos en un pequeño restaurante llamado Muelle Viejo. Pedimos langosta que era muy barata y recien pescada, ya estabamos acostumbrados al picante mejicano, pero la salsa que nos pusieron con la langosta era puro fuego, menos mal que no le pusimos mucha al principio. Sin exagerar, se nos durmió la lengua y el paladar, una sensación parecida a cuando el dentista te anestesia. Para contrarestar el picante no tuvimos más remedio que tomarnos unas XX, bien fresquitas. XX fue nuestra cerveza preferida en este viaje. Por la tarde más playita y luego de regreso por los 40 kms del camino de la muerte.

DIA 17. CANCÚN

Cancún

Cenando en nuestra habitación

Nos levantamos resacosos y cogimos un autobús que nos llevara a Cancún Playa. El que haya visitado la Manga del Mar Menor, le recordará mucho a Cancún. Es una lengua de tierra similar a La Manga, aunque eso si, las playas son más espectaculares.
Estabamos contentos de haber escogido Playa del Carmen como base para visitar la Riviera Maya, ya que Cancún no nos gustó demasiado, todo construido con grandes torres hoteleras que afeaban bastante el lugar. Aún asi disfrutamos de un buen día de playa, porque lo que no se puede negar es el que color del agua es impresionante, y eso que hacía bastante oleaje.
Comimos en Cancún y por la tarde de nuevo de regreso a nuestro hotel.

DIA 16. IMPRESIONANTE COZUMEL

Playa del Carmen, junto al hotel

A punto de descargar una tormenta en Playa Palancar

Unas birras en el chiringuito

Pedazo de cangrejo

Nuestra moto

Se levantó un día soleado en la Riviera Maya y decidimos coger un ferry hasta la Isla de Cozumel. Nos dirigimos al embarcadero y allí mismo, en unas taquillas, compramos los billetes.
Al llegar al puerto de Cozumel te asaltan decenas de personas ofreciendote hoteles, alquilar coche, scooter, excursiones, etc. Nosotros alquilamos una scooter y le preguntamos al del Rent a Car que nos aconsejara una playa bonita. Nos habló de una playa llamada Playa Palancar. Llegamos a la playa y allí tienes un parking y un restaurante tipo chiringuito donde comer o tomar una cerveza. También hay un club de buceo.
La playa era preciosa, hasta entonces la mejor que habiamos visto, la poca gente que había se concentraba incompresiblemente en la playa junto al chiringuito, nosotros nos fuimos unos 500 metros más allá, detras de un pequeño muelle, donde estuvimos completamente solos todo el tiempo. Luego para comer nos acercamos al chiringuito donde comimos muy bien, aunque no fue barato.
Por la tarde regresamos a Playa del Carmen y en el hotel ya nos habían comentado el primer día que nos podíamos quedar con la condición que nos tenían que cambiar de habitación este día, ya que la tenían reservada para un grupo organizado. Nos dieron una especie de bungalow, más modesto que la habitación, pero a cambio estaba en la misma playa. Cuando ya nos acomodamos a media tarde, vimos que de vecino teniamos a un brasileño que estaba de charla con dos holandesas. Más tarde cuando se fueron las holandesas, estuvimos hablando con él. El tio era todo un personaje, era representante de joyas, aunque Merce no lo tenía muy claro. Nos comentó que estaba de viaje de trabajo en Mejico D.F, pero como tenía unos dias libres, los había aprovechado para pasarlos en la costa caribeña.
Más tarde fuimos de nuevo a la fiesta del hotel y nos encontramos con el brasileño vecino de bungalow. Pasamos un buen rato con él, de juerga hasta la madrugada. Nos invitó a que lo visitaramos las próximas vacaciones en Porto Alegre (Brasil), pero al final entre copa y copa se nos olvidó pedirle el email y se marchaba temprano al día siguiente.


DIA 15. POR FIN EN LA RIVIERA MAYA

Hotel Blue Parrot

Columpios en la barra

Espectáculo de fuego en la playa

Fiesta en playa del Hotel Blue Parrot

Sobre las 06:30 de la mañana llegamos al fin a Playa del Carmen, después de un viaje en autobus de 12 horas. Arrastramos nuestras maletas desde la Estación de Autobuses hasta la zona centro, no había nadie por las calles. Empezamos a buscar hoteles, pero todos estaban ocupados, poco a poco nos fuimos acojonando hasta que decidimos que seguramente tendriamos que gastar algo más de dinero. Al final nos quedamos en el Blue Parrot Inn, en la misma playa. El hotel estaba bien pero no para pagar cerca de los 100$ que pagamos por noche, una barbaridad. Ahora ya pensando en frio, si hubieramos ido a preguntar a cualquiera de los todo incluido de Playacar, seguro que nos habrían cobrado lo mismo y no hubieramos gastado nada en comida y bebida.
Como era muy temprano todavía no tenian ninguna habitación libre, asi que dejamos las maletas en el hotel y nos fuimos a disfrutar de las playas del Caribe.
Pasamos el dia sin más y por la tarde a dormir la siesta, ya que la noche anterior habiamos dormido regular en el autobus.
Una buena cosa que tenia este hotel, es que por las noches se montaban fiestas en la misma playa, con espectaculos de malabaristas con antorchas, y las copas para las chicas hasta las 11 de la noche, eran gratis. El truco que hacia todo el mundo es que las chicas iban a por la copa de su pareja y luego se ponian otra vez en la cola para otra copa para ellas. Lo pasamos muy bien esa noche en la fiesta de nuestro hotel.